Tanto la vuelta al trabajo como al estudio o lo que podríamos decir, la vuelta a la “vida”, después de un período de receso, puede resultar bastante caótico si no se planea de antemano el modo en que se encarará.
Son esos momentos que si no se van diseñando conducen a que la vida entre en caos. Todo, de pronto, parece desconcertante, desordenado y vacío. Enseguida se nos ocurre pensar en que quisiéramos comenzar todo de nuevo. Pero, ¿Cómo?
Esto nos sucede en gran parte cuando retornamos a la vida rutinaria después de unas merecidas vacaciones o hasta es posible que ocurra luego de un simple fin de semana; también puede acosarnos en la vida cotidiana.
Después de un alto en la ruta de la vida y en la vorágine laboral o estudiantil pensamos cómo es posible que hayamos sobrevivido, o más propio decir, vivido, en ese desorden. Y es que cuando la mente está distendida, en blanco, llena de relax y descansada, no mira con los mismos ojos la realidad que la rodea. Y todo aquello que nos parecía “normal” aunque estuviera por demás colisionado, luego lo percibimos imposible de admitir con nuestra mentalidad renovada que se prefiguró un orden que, en la realidad, nunca había llegado a manifestarse.
Frente a esa perspectiva: ¿Qué hacer?
¡Tranquilidad! Ese es el primer paso. Luego serenidad y finalmente poner en juego “la sabiduría del orden”. Todo aquello que quiera ser controlado con éxito se inicia de esa manera: orden, serenidad y quietud.
Se debe comenzar por establecer prioridades y dar a cada cosa o situación el lugar le corresponde. Así ya se completará la primer “lista” y con ella en mano se podrá continuar. El orden visual y temporal de los eventos contribuye a que se avance en armonía.
¿Qué otros beneficios brinda una buena organización?
. Hace que todo se torne más productivo y que los recursos con los que se trabaje se aprovechen totalmente.
. Contribuye a que el ambiente de trabajo o de estudio se torne más agradable y así se mejore la actitud general.
. Provoca un ahorro de tiempo increíble.
. Mejora la calidad de todo lo que hace en un cien por ciento.
Todo aquello que planeabas mientras descansabas para el nuevo año laboral o escolar, ¡es posible! Sólo debés proponerte intentarlo y la vuelta a la rutina será mejor de lo que esperabas…
Contenido producido originalmente por FastForward Concepts para Colegio Santo Tomás de Aquino.